lunes, 14 de octubre de 2013

Revolución Verde






El término Revolución Verde se refiere a la renovación de las prácticas agrícolas a partir la década de los cuarenta del Siglo XX. 
Debido a su éxito, las tecnologías de la Revolución Verde se difunden por todo el mundo durante los años 1950 y 1960, aumentando significativamente las producciones agrícolas de cultivo.
Se atribuyen a Norman Borlaug, (ingeniero agrónomo, genetista, fitopatólogo, humanista estadounidense) las primeras investigaciones en los años cuarenta en México para conseguir trigos que desarrollaran resistencia a las enfermedades (roya), y después nuevas variedades de alto rendimiento. 

El regadío automatizado y masivo ha sido una de las consecuencias de la Revolución Verde.

Mediante la combinación de las variedades de trigo de Borlaug con nuevas tecnologías agrícolas mecanizadas, México fue capaz de producir más trigo del que consumían sus ciudadanos, llegando a exportar trigo en los años sesenta.
Debido al éxito de la Revolución Verde, sus tecnologías cuajan  en los Estados Unidos, que pasó de importar la mitad de su trigo a convertirse en autosuficiente en la década de 1950 y poco después se convirtió en exportador. Después llegarían países como Turquía, Túnez, España, Argentina, China, Australia…
Aprovechando las tecnologías de la Revolución Verde para producir más alimentos para la población mundial creciente, la Fundación Rockefeller y la Fundación Ford, así como muchas agencias gubernamentales de todo el mundo comienzan a financiar la investigación. En 1963, con la ayuda de estos fondos, la Oficina de Estudios Especiales en México se transformó en el CIMMYT, Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo. 

Las semillas de alto rendimiento precisan del uso y abuso de grandes cantidades de fitosanitarios para poder hacer frente a plagas y enfermedades.

Borlaug y la Fundación Ford (CIMMYT) llevan sus esfuerzos en 1961 a Pakistán e India, introduciendo las semillas híbridas en la producción agrícola y provocando un incremento notable de la productividad agrícola en naciones que estaban al borde de la hambruna masiva debido a su creciente población.
Desarrollaron una nueva variedad de arroz, IR8, que produce más granos por planta cuando se cultivan con riego y fertilizantes. En la actualidad, India es uno de los productores de arroz del mundo y líder en el uso de arroz IR8, que extendió por toda Asia en las décadas siguientes.
La invención y desarrollo de esta agricultura incrementó exponencialmente la producción mundial de alimentos, gracias a lo cual algunos consideran que se salvaron más de 100 millones de vidas humanas. Borlaug recibió el Premio Nobel de la Paz en 1970.

Variedades de millo peruanas: muchos sabores, muchos colores, diferentes requerimientos ecológicos, posibilidad de cultivo todo el año.

La ingeniería genética permitió desarrollar durante la Revolución Verde variedades de alto rendimiento. Eran plantas criadas y desarrolladas en laboratorio específicamente para responder a los fertilizantes y producir una mayor cantidad de grano por hectárea plantada.
Las plantas que tenían las semillas más grandes fueron seleccionadas para alcanzar la mayor producción posible. Después de la cría selectiva de estas plantas, han evolucionado hacia especímenes cuyo rasgo común  es la semilla mayor. Estas semillas más grandes aumentan el rendimiento de grano y un mayor peso sobre el suelo.
Este mayor peso sobre el suelo luego dio lugar a una asignación mayor  de fotosíntesis. Al maximizar la semilla (o porción de alimento), la planta tenía que ser  capaz de usar la fotosíntesis de modo más eficiente, debido a que la energía producida durante este proceso va directamente a la porción de alimento.
Por último, mediante una selección de cultivo de plantas que no eran sensibles a la longitud del día, los investigadores fueron capaces de duplicar la producción de un cultivo, porque las plantas deben responder de igual manera en cualquier parte del mundo, sin tener en cuenta la disponibilidad de luz. 

Arroces tradicionales del Delta del Ebro. Aún es posible en territorios relativamente pequeños, encontrar una gran variedad de semillas.
El uso masivo de fertilizantes de síntesis química (la mezcla NPK, es decir nitrógeno, fosfatos y potasio), son en gran parte lo que hizo la Revolución Verde posible, y cambió para siempre las prácticas agrícolas, porque las variedades de alto rendimiento no pueden crecer con éxito sin la ayuda de fertilizantes, cada vez más caros y dependientes de la industria química, que a su vez, depende de la extracción y comercialización de petróleo.

La extensión del regadío también jugó un papel importante cambió para siempre regiones agrícolas donde cultivar las variedades de alto rendimiento. Antes de la Revolución Verde, la agricultura comercial se limitaba a zonas con precipitaciones importantes, pero la generalización del riego permite que el agua “sobrante” pueda ser embalsada y trasvasada a zonas más secas, lo que ha puesto más tierras en producción agraria, aumentando los rendimientos de los cultivos en todo el país. Esto fue lo que ocurrió en España con los trasvases (Tajo-Segura) y la generalización del regadío mediante los Planes Badajoz y Jaén en los años sesenta.

La extensión del invernadero, donde todos los factores que intervienen en los cultivos se controlan al máximo (riego, suelos, insolación, vientos, fertilización) ha sido otra de las consecuencias de la Revolución Verde.
Cultivo de flores ornamentales en China

El desarrollo de variedades de alto rendimiento significa que sólo unas pocas especies son susceptibles de ser cultivadas lo que ha generado una gran pérdida de biodiversidad genética agraria dentro de las principales especies alimenticias. Cientos de miles de variedades heterogéneas de plantas cultivadas y adaptadas a multitud de ambientes, han sido sustituidas por un reducido número de variedades comerciales de laboratorio y muy uniformes. 
La uniformidad en los cultivos condujo a que estas variedades fueran más propensas a enfermedades y plagas, ya que no estaban adaptadas. Con el fin de protegerlas se generalizó el uso de pesticidas.
En India, por ejemplo, hubo miles de variedades de arroz antes de la Revolución Verde y en la actualidad hay alrededor de diez (todas variedades de alto rendimiento).

Una de las consecuencias de la extensión de invernaderos es la uniformidad del paisaje.
El Ejido, Almería: El Mar de Plástico.

Se estima que, a lo largo de la historia, el ser humano se ha alimentado de unas diez mil especies gracias a la agricultura. Hoy, no más de 120 especies cultivadas de plantas nos proporcionan un 90% de los alimentos, y tan sólo 12 especies vegetales y 5 especies animales nos proporcionan más de un 70% de ellos. 
Cuatro especies vegetales (papas, arroz, millo y trigo) y tres especies animales (vacas, cochinos y pollos) nos proporcionan más de la mitad. Las variedades o razas dentro  de cada una de estas especies también se reducen.
En Estados Unidos sólo queda menos de un 10% de árboles frutales y especies hortícolas que eran de uso común por los granjeros a finales del Siglo XIX. Los Bancos de genes han logrado conservar muy pocas. En Méjico se ha perdido el 80% de las variedades documentadas en 1920. En Corea, sólo el 26 % de las variedades locales cultivadas en huertos familiares en 1985 seguían utilizándose en 1993. 

Paisaje tradicional rural del interior de la Península Ibérica: convivencia de bosques con caseríos y cultivos, adaptación a las curvas del terreno, prados ganaderos. La diversidad es sana.

A nivel mundial entre el 80 y 95 % de las variedades conocidas para los cultivos más importantes a principios del siglo XX se han perdido para siempre. 
La pérdida de diversidad biológica agrícola ha provocado una reducción de la capacidad de las generaciones presentes y futuras para afrontar imprevisibles cambios medioambientales y necesidades humanas. 

Otros aspectos negativos comenzaron a hacer acto de presencia:
  • Excesivo costo de las semillas, cuya producción fue acaparada por unos cuantos laboratorios a nivel mundial.
  • Carísima tecnología complementaria (en especial de regadío), que estaba patentada por unas pocas compañías multinacionales, lo que creaba dependencia hacia esas empresas.
  • África, el continente más azotado por el hambre, la desnutrición y las enfermedades derivadas, no se ha beneficiado de la Revolución Verde. Se ha achacado a la falta de infraestructuras, la corrupción gubernamental, y la inseguridad sociopolítica, pero también se dice que la causa es que no existía posibilidad de negocio, así que no se ocuparon de los problemas agrícolas africanos. A la larga ha resultado beneficioso, puesto que los campesinos africanos han seguido conservando variedades locales de mijo, sorgo, maní o cebada.
  • La constatación de que los cultivos tradicionales eliminados estaban mejor adaptados a los ambientes locales, a sus características climáticas, edáficas y de resistencia a plagas y enfermedades. 
  • La homogeneidad de las nuevas variedades causó la aparición de plagas, combatidas mediante el uso masivo de costosos fitosanitarios.
Mercado de alimentos entre Angola y Congo: naranjas, piñas tropicales, calabazas, mandioca, plátano...todas han escapado a la uniformidad de las semillas de alto rendimiento.

A consecuencia de esto nacen movimientos que luchan por la disminución del uso de agroquímicos, basando sus argumentos en la agroecología, que sería definida como:
Aquellos sistemas agrícolas que promueven la producción sana y segura de alimentos y fibras textiles desde el punto de vista ambiental, social y económico. 

Coles y hortalizas en un campo donde crecen otras hierbas, flanqueadas por setos vivos y arboleda. 

La fertilidad del suelo es la base para una buena producción, respetando el medio ambiente en todos sus aspectos. La agricultura orgánica reduce considerablemente las necesidades de aportes externos al no utilizar abonos, sustancias químicas, ni plaguicidas u otros productos de síntesis. En su lugar permite que sean las leyes de la naturaleza las que incrementen tanto los rendimientos como la resistencia de los cultivos.
La agricultura industrial, por el contrario,  se apoya en cinco grandes pilares: la maquinaria agrícola moderna; el transporte de alimentos a largas distancias; los agroquímicos; la biotecnología y los sistemas de riego.
Los tres primeros están relacionados directamente con la producción y consumo de petróleo. Así pues, de la misma manera que la agricultura industrial ha sido un factor importante para la transición demográfica, su crisis al agotarse el petróleo puede suponer futuras hambrunas, crisis alimentarias y un aumento drástico de la mortalidad a nivel mundial.

¿Mapa de los paisajes agrarios de España?.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Almácigos.






Es un árbol del género Pistacia, familia Anacardiaceas, como el pistacho (Pistacia vera), el lentisco (Pistacia lentiscus), o la cornicabra (Pistacia terebinthus). Son arbustos o árboles pequeños, adaptados a la sequía y al clima mediterráneo. 
Pistacia atlantica (almácigo), fue descrita por René L. Desfontaines y ya aparece en 1799, en la Flora AtlanticaEl nombre árabe es betoum. En parsi se llama baneh. Más vigoroso que las otras especies, se suele emplear como portainjerto aunque no resiste bien las heladas.

El almacigo es nativo de la Meseta Iraní, donde es común en los bosques de los valles de los Montes Zagros, desde donde se distribuye de forma natural hasta el norte de África (Chipre, Oriente Medio, Sahara septentrional, Tafilalet, Tamurt Idurar). Es raro en el Macizo de Ahaggar 

Almácigo con frutos. Zona baja del casco urbano de Guía de Isora (Las Rositas).

En Canarias, no es posible encontrarlo en Lanzarote y El Hierro, siendo Gran Canaria y Tenerife donde se encuentra más abundante, llegando a formar rodales continuos, de tipo monoespecífico. Son comunes en el oeste de Gran Canaria, entre Agaete y La Aldea, y en Tenerife, en el sur de Anaga, Candelaria, Güímar, Arona, Adeje y Guía de Isora. Es una de las pocas especies de hoja caduca autóctonas del archipiélago de Canarias.

Esta especie debió de ser frecuente hasta hace poco, debido a la abundancia de toponimia (casi cien registros para Tenerife), y a su presencia en las crónicas. El avance de las tierras de cultivo y el aprovechamiento de maderas y de resina, quizás han influido en su escasez actual.

De hoja caduca, alcanza entre 10 a 12 metros de altura, de crecimiento muy lento. El diámetro del tronco llega a alcanzar un metro a los doscientos años, logrando edades avanzadas (hasta mil años según algunas fuentes). 
Su copa es espesa y enmarañada y la corteza fracturada y de un color gris ceniciento. Las ramas más viejas presentan el mismo diseño, fracturado y grisáceo, lo que le da al árbol aspecto de ser muy viejo.

Almacigo, con el tronco muy ramificado. El Bocho, entre Igueste de Candelaria y Barranco Hondo.

Hojas, verde oscuras, lustrosas, de hasta 15 cms. de largo, ovales, casi sésiles, brillantes por arriba, de 7-9 folíolos, imparipinnados con pecíolos un poco alados. En las zonas más frías las hojas brotan en mayo y caen en noviembre.
Flores dioicas (existen plantas masculinas y plantas femeninas) pequeñas, de un verde moderado. Las masculinas parduzcas; las femeninas, en racimos cortos, laxos,  sobre arboles diferentes. En algunas comunidades dominan los ejemplares hembra. Florece en los meses de marzo y abril.

Fruto grueso y esférico, como un guisante, rojizo luego cambiando a cerúleo. Maduran de julio a octubre, comenzando a dar frutos a la edad de ocho a diez  años, abundantes frutos en 2-3 años.

Detalle de las hojas del almácigo.

Especie típica del bosque termófilo canario, su distribución altitudinal varía de una isla a otra; en general se sitúa, en la vertiente norte desde casi el nivel del mar hasta los 500 metros, y en la vertiente sur entre los 200 y 800 metros.
Los bosques de transición o termófilos  se localizan entre el piso basal y el monteverde (norte) y entre el piso basal y el pinar (sur). 
Esta clasificación abarca diversas formaciones vegetales de origen mediterráneo, como los palmerales canarios (Phoenix canariensis) acebuchales (Olea cerasiformis), bosquetes de lentisco (Pistacia lentiscus) o de almácigos (Pistacia atlantica) sabinares (Juniperus turbinata ssp. canariensis). Aparecen también los dragos (Dracaena draco y Dracaena  tamaranae) el peralillo (Maytenus canariensis) o el marmulán (Sideroxylon marmulano). Los arbustos son numerosos, como la leña negra (Rhamnus crenulata), granadillo (Hypericum canariense) o jazmín (Jasminum odoratissimum).
Su situación en las medianías, donde se sitúan los asentamientos humanos más antiguos, con sus requerimientos en agua, madera y suelos para cultivar, ha provocado que ésta sea la formación vegetal más dañada y con menor distribución en la actualidad. 


Hojas del almácigo. Las manchas rojas se deben a las agallas producidas por un insecto parásito.

Está protegida por el "Anexo II de la Orden de 20 de febrero de 1991, sobre protección de especies de la flora vascular silvestre de la Comunidad Autónoma de Canarias". 

Es importante su valor contra la erosión. Fortalece el suelo y se emplea para la repoblación forestal de tierras áridas y laderas empinadas y contra los deslizamientos de tierras. Es una planta ornamental que se usa en el arbolado urbano. 
Además, los almacigares son un buen refugio de especies de invertebrados y ornitofauna, incluyendo endemismos, como el herrerillo, búho chico, mosquitero, capirotes, canarios, curruca tomillera, abubilla o tabobo, perdices, e incluso aguilillas.

Las semillas se pueden comer crudas, como frutos secos, y contienen hasta un 60% de grasa. En Turquía se hacen dulces con el denominado pistacho de tsukpi. El fruto inmaduro se recoge y se come con leche agria. 

Ejemplar con porte arbustivo, quizás por su juventud o por el ramoneo debido a la ganadería de cabras.
Lomo Carnada. La Mesa de Candelaria, entre Araya e Igueste.

La resina que exuda es intensamente aromática y se emplea para la fabricación de alcohol y lacas. Contiene aceites esenciales se utilizados en la industria de la perfumería. Mezclada con mantequilla, se utiliza externamente para tratar las heridas. Esta resina se usa como goma de mascar en Kevan, Turquía, donde se la llama goma del árbol kevove.

Las hojas son ricas en taninos, hasta un 20% en las agallas causadas por un pulgón parásito y son la materia prima para el curtido en la industria del cuero. Las hojas machacadas poseen propiedades astringentes y antidiarreico.

La savia se seca y se emplea como incienso, ya que su combustión da un olor agradable, generando ambiente en templos, celebraciones y ceremonias religiosas.
Su preciosa madera se ha aprovechado en ebanistería y carpintería.
Los usos tradicionales en Canarias, son diversos y variados. Sus hojas se colocaban en el calzado como remedio para el mal olor. Su infusión cura las diarreas y su corteza masticada cura las encías.

Ejemplar muy ramificado, ya dentro del dominio del pinar. Hoya del Cuerviño. Zona alta de La Mesa. Candelaria.

miércoles, 2 de octubre de 2013

El ecosistema marino de la Corriente Fría de Canarias: ¿Prospecciones petrolíferas?.



La  Corriente marina fría de Canarias se encuentra en  el Océano Atlántico y se caracteriza por su clima templado, siendo más fuerte cerca de la costa, debilitándose en alta mar y acelerando su paso entre las Islas Canarias y la Costa africana. Frente a la costa del noroeste de África presenta importantes surgencias y otros incrementos de nutrientes, según la época del año. 

La surgencia, afloramiento o Upwelling (subida de las aguas profundas) es un movimiento de subida de las aguas frías a lo largo de la costa, gracias al efecto de los vientos desde tierra o de un viento que sopla paralelo al litoral, que permanece constante. Este fenómeno es típico de las zonas donde existen corrientes marinas frías.


En este mapa de radiancia del Atlántico Norte, se observa claramente que las aguas con déficit de la misma son las más próximas a la costa africana, entre Agadir y Dakar.

El agua de la superficie (más caliente) es empujada hacia alta mar y como consecuencia se produce un descenso del nivel del mar en la costa. Las aguas frías de las grandes profundidades suben a la superficie para subsanar este "vacío" de agua. 

Se genera desde las costas de Galicia y Portugal, aunque se acentúa a partir del Cabo de San Vicente, debido a que el Anticiclón de las Azores produce vientos del norte-noreste en dirección sur-suroeste, llamados Alisios.
Las corrientes que se originan, unidas a la fuerza de Coriolis, alejan el agua de la superficie hacia alta mar. 


A medida que nos alejamos de la costa africana, el agua del mar se calienta progresivamente.

El mar que rodea a Canarias es relativamente frío, para las latitudes en las que nos encontramos, aunque la mera posición geográfica de las islas genera zonas de sombra, con agua caliente al sur de las islas y sectores  de contacto donde existe acumulación de biomasa de los recursos marinos. 

Esta corriente repercute tanto en el clima como en la biología, puesto que: 
Estabiliza la dinámica atmosférica, evitando las precipitaciones, pues al enfriar el aire a baja altura, impide que ascienda, con lo que no puede condensarse y provocar lluvias. 
Implica la existencia del banco pesquero canario-sahariano, puesto que aumenta la productividad de las aguas, al ascender con el agua fría, nutrientes que se encuentran en las zonas profundas del océano.
Modera las temperaturas en verano, que es el momento del año donde el soplo de los alisios es más intenso.
Temperaturas superficiales más bajas que otras zonas de igual latitud.  17-18 ºC en marzo y 24-25 ºC en septiembre.
Variación horizontal de la Temperatura (hasta 1º C). Más cálidas en el Hierro.
Variación horizontal de la salinidad (aguas más salinas en el Hierro). 36,2-36,8 ‰


Esquema del proceso de surgencia en la costa africana.

Estas condiciones hidrográficas y climáticas juegan un papel importante en el impulso de la dinámica de la Corriente Fría, que muestra variaciones estacionales, espaciales, e incluso en ciclos interanuales de media y larga duración.

La productividad de la Corriente Fría de Canarias ha sido un hecho histórico que se mantiene en la actualidad, con matices. Los últimos estudios arrojan importantes variaciones estacionales y a largo plazo, pero, desde el punto de vista productivo, el sistema está catalogado actualmente  como como Clase I, altamente productivo, con más 300 gramos de carbono por metro cuadrado anuales (productividad primaria). Esto repercute en una gran cantidad y variedad de aves (sobre todo migratorias) y de peces.

El contacto entre la corriente de Canarias y las zonas de sombra da como resultado dos remolinos; un giro ciclónico en el oeste y un giro anticiclónico en el este. Se trata de áreas de acumulación de zooplancton, cuya comunidad está compuesta generalmente de crustáceos microscópicos similares a camarones, que sirven de alimento primordial al resto de la cadena trófica.


Las surgencias y afloramientos inciden en la riqueza de nutrientes, y por tanto
en la biodiversidad marina de la zona afectada por la Corriente Fría.

La productividad es muy alta alrededor de los centros de surgencia, existiendo, como especies más comerciales las sardinas, jureles, caballas, merluzas, túnidos y también cefalópodos, como las sepias comunes, el choco canario y la sepia africana gigante. Los cetáceos están presentes (zifios, delfines, calderones, cachalotes), tanto migratorios como residentes.

Cinco décadas de observación han demostrado la alta variabilidad que existe debido a su particular régimen de surgencia.  Ha habido fluctuaciones dramáticas en los peces y la pesca. Se ha constatado  una disminución en la captura de 2,3 millones de toneladas en 1990 a 1,8 millones de toneladas en 1999 (FAO, 2003). Hubo fuertes caídas en 1992, 1993 y 1994. 

Más del 60% de la captura se compone de pequeños pelágicos (arenque, sardinas, anchoas), aunque, sin descartar los factores antrópicos, hay un impacto evidente de la intensidad del afloramiento sobre la distribución espacial y la abundancia de los peces.


La variedad de cetáceos en las aguas de Canarias y de la Corriente fría es tal que vienen siendo usada desde hace años como otro reclamo turístico más. 

Las aguas de la Corriente de Canarias está severamente impactada en términos de sobrepesca , con consecuencias económicas graves, especialmente en su parte sur. 
Sin embargo, estos impactos están disminuyendo, aunque las pesquerías actuales están cada vez más presionadas por las flotas pesqueras extranjeras procedentes de los países de la Unión Europea, que quieren más acceso a la pesca. Se hace urgente evaluar la sostenibilidad de los recursos pesqueros.

Otro de los factores que incide gravemente en la salud del ecosistema es la contaminación. La presión migratoria hacia las ciudades de las zonas costeras del África Occidental se ha acelerado por la creciente desertización del interior y de sus zonas rurales. Muchos de los problemas de contaminación que afectan al mar se asocian con el desarrollo urbano, de infraestructuras,  servicios (turismo) e industrial a lo largo de la costa.

Otros problemas son la escorrentía como producto de la erosión del suelo, la liberación de productos químicos de uso agropecuario (en especial organoclorados) y la descarga de aguas residuales (con la correspondiente carga sólida, en concreto plásticos). 


Estas son las zonas susceptibles de prospecciones de hidrocarburos. Justo enmedio del flujo de la corriente fría. Los derrames no solo afectarían a Canarias, sino pondrían en grave peligro las pesquerías de las que depende millones de personas en Marruecos, Sahara, Mauritania, Senegal y Guinea. ¿Estamos dispuestos a soportar la presión de legiones famélicas a nuestras puertas?.
Las riberas que baña la Corriente de Canarias pertenecen a ocho países diferentes, algunos de los cuales dependen de sus recursos marinos, como peces, fosfatos y petróleo. 

El sector pesquero es un sector importante de la economía, satisfaciendo las necesidades de alimentos e incluso de divisas derivadas de las concesiones de explotación.
Marruecos tiene una industria pesquera vigorosa. Senegal emplea alrededor de 100.000 personas, tanto de la pesca artesanal como en la flota arrastrera. Más de medio millón de personas en Senegal, Mauritania y Guinea-Bissau dependen de la pesca para subsistir.


Accidente de la Deepwater Horizon en el Golfo de México. No existe seguridad de que tal cosa no ocurra en aguas canarias.

Sin embargo, el agotamiento de las poblaciones de peces, y la presión de las flotas pesqueras procedentes de los países de la Unión Europea tiene consecuencias económicas y ecológicas. Los problemas más acuciantes  se relacionan con la destrucción y degradación de los ecosistemas y la pesca excesiva. 

Aunque existen ventajas objetivas en la cooperación internacional, su gestión es complicada, debido a la herencia del pasado colonial y la situación política de estos países (todos son ex colonias europeas, a excepción de Canarias que aún hoy pertenece a España). El caso más claro es el del antiguo Sáhara español, (Sáhara Occidental), ocupado por Marruecos,  y con un futuro incierto. Esto repercute en la ausencia de marcos de cooperación que aborden los problemas transfronterizos y la gestión del medio marino y sus recursos. 

Hay leyes regionales incompatibles y una escasez de la normativa ambiental. Senegal, Mauritania y Guinea-Bissau son conscientes de estos problemas y están tomando medidas para mejorar la protección de algunos de sus más frágiles ambientes marinos, desarrollando áreas marinas protegidas. Mauritania está tratando de prohibir la pesca comercial en los humedales costeros. 


Playa de Lima. Arafo. Costa Sureste de Tenerife. El mar, impulsado por el soplo de los alisios suele traer abundante alquitrán (piche) y residuos sólidos hasta estas costas.


El intenso tráfico marítimo es uno de los factores más preocupantes para la supervivencia de las poblaciones de cetáceos que, con una treintena de  especies convierte a esta zona en básica para la cetofauna en el Atlántico Norte.

La realización de exploraciones y explotaciones petrolíferas supone un peligro para la vida marina existente en la zona por los posibles vertidos accidentales (incluida la afección a desaladoras de agua de mar y el suministro diario a la población) que pudieran producirse. 
El sector energético es uno de los principales responsables de la emisión de gases de efecto invernadero, principalmente a consecuencia de procesos de combustión para la obtención de energía, donde intervienen combustibles fósiles. 

La extracción de petróleo genera  una mayor emisión a la atmósfera de dióxido de carbono, que provoca un aumento de la temperatura superficial de la Tierra, causa principal del cambio climático. Tal aumento de gases de efecto invernadero es la causa principal de la acidificación del mar. La continua y progresiva absorción de CO2 por parte de los océanos está amenazando con alterar la química oceánica, que es cada vez más ácida y afectando seriamente la biodiversidad y riqueza marina.


La posibilidad de prospecciones petrolíferas ha movilizado a buena parte de la sociedad canaria.